jueves, 16 de julio de 2009

Canto que ha sido valiente

Me senté a escribir, por regalarme un rato de placer, pero no me apetecía relatar la visita a algún lugar, tampoco el contar vida y magia o miseria (según se mire) del discurrir cotidiano.
Mujer afortunada o experta en buscarse la fortuna... que fui yo quien dio el primer pellizco, consigo que del otro lado del océano me inspiren, me llenen el día de ayer, el día de hoy y seguro, también, el de mañana. Me lo han llenado de músicas y de poemas, he llorado al volver a escuchar esa vieja cinta en la que tengo grabado "Fulgor y muerte de Joaquín Murrieta".
El sugerente e impúdico Belmar me seduce a repensar en otro tipo de viajes, viajes interiores, viajes de la conciencia.
Que "me entregaron una pala" me canta Víctor Jara y oigo a través de la distancia una voz que me susurra que lo importante, lo realmente importante es... apenas nada.
Largo, larguísimo viaje interior.... "mal haya la vida pura que he tenido que llevar" pero también que... "la alegría de sembrar no te la pueden quitar".
Y se me calienta el corazón al recordar, pues el maravilloso viaje de la conciencia no es un viaje solitario, me acompañaron amigos, enemigos, amores de los que casi matan, amores que se murieron. Me acompañaron canciones y cantores, poemas y poetas, novelas, cine, pinturas. Y me acompañaron a mí, que nací en medio del barro, como Herminda, pero que tuve la suerte de que no me mataran. Que vi. la luz primera en las frías tierras mineras del norte.
Respiro y siento, me intuyo también un tanto infiel al cantor que me sugirió el mito que me ha acompañado en mi nadear por la vida.
Porque yo respiro, Víctor, respiro, siento, aún amo hoy y amaré mañana y en mi patio un pimiento rojo sigue floreciendo año tras año.
Me quedabas lejos, lejos en la distancia, lejos en la edad, que eras mayor que mi padre pero sé que sin ti, sin tu canto, sin Quilapayún, sin Intilimani, yo no habría podido hacer viajar a mi conciencia, mi pensamiento, mi corazón, tan lejos como lo he hecho. Sin vosotros hubiera sido mucho más difícil salir de la miseria y el analfabetismo emocional que traen consigo el hambre y el miedo.
Que también os debo a vosotros que mi mito romántico no se haya construido sobre los príncipes azules de los cuentos de hadas sino sobre los hombres cantores que nos dejaron su canto con intención de tornar un gramo de miseria en un gramo de justicia, de amor. Químicos maravillosos, que lo conseguisteis hacer en algunos corazones.
Y gracias a ti también, Belmar, por haberme sugerido una mirada hacia adentro, con tus maldiciones. Cambian los tiempos pero aún sigue habiendo gente consciente de ser esa mezcla de ángel y bestia.

sábado, 11 de julio de 2009

Como la cigarra

He puesto a cantar a Mercedes Sosa:

"Tantas veces me mataron, tantas veces me morí, sin embargo estoy aquí, resucitando.
Gracias doy a la desgracia y a la mano, con puñal, porque me mató tan mal y seguí cantando."

Levanto la vista y veo mi imagen reflejada en el cristal.

"Cantando, al sol, como la cigarra, después de un año bajo la tierra, igual que sobreviviente que vuelve de la guerra."
Me atuso el cabello desgreñado y les doy un manotazo a las lágrimas.

"Tantas veces me borraron, tantas desaparecí, a mi propio entierro fui, solo y llorando. Hice un nudo, en el pañuelo, pero me olvidé después que no era la única vez, y seguí cantando.
Cantando, al sol, como la cigarra, después de un año bajo la tierra, igual que sobreviviente que vuelve de la guerra."
Ya estoy en pié, ya canto con ella.

"Tantas veces te mataron, tantas resucitarás, tantas noches pasarás desesperando.Y a la hora del naufragio, y a la de la oscuridad, alguien te rescatará para ir cantando.
Cantando, al sol, como la cigarra después de un año bajo la tierra, igual que sobreviviente que vuelve de la guerra."
Y le digo a Mercedes que vuelva a cantar y canto con ella y vuelvo a ver mi imagen reflejada en el cristal y mi imagen me sonríe.

El poder curativo de la música.

martes, 7 de julio de 2009

Amauta Ñampi


Es el nombre de una escuela de Puyo, Cantón Arajuno, Provincia de Pastaza, Región Amazónica de Ecuador. Significa algo así como "camino de la ciencia y el saber".
Supe de ella por mi amigo Quique Cano, que se marchó para siempre sin despedirse de nadie, el fue quien me dio el teléfono de su directora Margarita López Andi y hasta Puyo que me fui para conocerla.
Margarita es una mujer fuerte, sabia y con la lengua muy larga, cosa que me encantó , hablaba sin reservas, sin tapujos, sin miedo. Crítica con la dirección machista del movimiento indígena, había pasado por varios escalones y los había abandonado todos. En esos momentos era la directora de la escuela bilingüe y también tenía intención de dejarlo, pasar a ser una simple maestra, harta de tantas trabas.
Nos habló de la escuela, mientras tomábamos la chicha que había preparado la madre de Carlos (un trabajador despedido de la petrolera que actúa en la zona) en una especie de taberna a las afueras de Puyo que también hace las veces de centro de reunión para las mujeres, hasta de taller de artesanía, allí trabajan el barro y la madera.
Amauta Ñampi es una escuela con las aulas en semicírculo, recogiendo las enseñanzas occidentales, decía burlona,haciéndole caso a esa norma nuestra que dice que es de mala educación el darse la espalda, nos habló de la intención de armonizar las culturas, de relacionar el conocimiento y la práctica, de la pelea contra la educación memorística.
Margarita había estudiado con las monjas y había sufrido mientras aprendía. Hija del Yachak Banku Pablo López, Yachakuna (curanderos, shamanes), heredera de la sabiduría de su padre que rompió la tradición de transmitirla al hijo varón, también entre risas, según ella , porque sus hermanos no eran muy de fiar, no ceja en su empeño de recuperar la medicina prehispánica y de darle incluso un contenido "científico", al modo occidental. Reconoce que se toman el trago del jarabe que saben que sirve para curar determinada cosa sin ninguna medida, cuanto más mejor. En su escuela se enseña, además de matemáticas, geografía, lengua y todo lo que es obligado enseñar, cosmología, mitología, símbolos... cultivan la tierra....


Se me quejó Margarita, dijo estar cansada de hablar y de enseñar su trabajo a los occidentales que pasaban por allí y de los que nunca más volvía a saber y me miraba muy dentro mientras me hablaba. Le prometí que tendría noticias mías y he cumplido mi promesa, continúo moviendo cuantos hilos puedo para conseguir hacer llegar a su escuela ese laboratorio que necesitan.
El proyecto se quedó encallado tras la muerte de Quique pero es posible que ahora haya alguien más que me ayude a sacarlo adelante, cruzo los dedos y sigo recordando.
Margarita tiene dificultades con la tecnología, aunque lo intenta, pero su hijo Paul no tiene ninguna y me escribe casi todas las semanas y me cuenta como combina sus estudios de Derecho con su grupo de música tradicional y me pide que vuelva con ellos a la selva una temporada para alimentarme de la fuerza de la pachamama. Esta noche he soñado con Margarita y la he vuelto a oír reír cuando a su pregunta de cómo me sentía le contesté que hacía un rato que veía lo mismo pero con colores más brillantes. Y ella me respondía que tenía que volver a pasearme por el orquidiario de Omar Tello.